El molino de maíz de Rafael Toriz (Xalapa 1983) es una historia que se desarrolla en una comunidad de la sierra de Hidalgo, en el seno de una familia campesina, desde donde se nos presenta un drama que habla sobre la fragilidad de la existencia humana, y de cómo lo que pudiera ser una vida en familia feliz y plena, de pronto enfrenta un hecho que desencadena un vuelco inesperado trastocando por completo el destino de los participantes. La obra no es anecdótica, por medio saltos en el recuerdo de la MUJER vamos descubriendo el cariño de una pareja de campesinos, la ternura por el hijo al que aman y los logros conquistados; SARMIENTO el esposo, ha conseguido en prenda un molino de maíz que se mueve con agua, el único del pueblo; por lo que desde el amanecer frente a su vivienda hay una enorme fila de clientes en espera de ser atendidos. Los fines de semana los tres van de paseo y se compran ropa nueva, siendo la envidia de los vecinos. Les va muy bien con el servicio del molino y además con la venta de zacahuil. En medio de esa burbuja de felicidad la pareja se descuida y el niño pequeño, jugando y sin darse cuenta cae dentro del molino que inexplicablemente vuelve a funcionar provocándole la muerte. Los padres escuchan los ruidos extraños y se dan cuenta de lo ocurrido y cuando llegan a buscarlo ya nada pueden hacer. A partir de esa tragedia la felicidad se torna tristeza y amargura, se desencadena así una racha de mala suerte allí en el mismo lugar donde antes había abundancia, todo el pueblo les da la espalda por considerar que están salados; cada evocación del pasado es triste amargura que va desmoronando a la pareja de esposos poco a poco, hasta ser apenas sombras o fantasmas que deambulan sin descanso en la sal de los recuerdos. Guion Rafael Toriz RepartoSinopsis
Créditos
Dirección Cuitláhuac Pascual
Música original Amir Moreno
Marisol Torres Goxon
José Pablo Coarasa
